Ver una entrada al azar

jueves, 21 de agosto de 2025

"Borderline" poemas de Gibran Mouarbes Giraldo


Borderline   
 
Veo nuevamente el borde. 
Pareciera que a todos lados 
donde voy hay un abismo 
entre mi sima y el horizonte. 

En la orilla sucede mi vida 
cerca a los filos y barrancos 
por los que espero no ir a 
despeñarme al devolverme. 

Entre la niebla se oye el río, 
invoco mis cumbres de antes, 
y así poder soportar la altura: 
le temo más que a la soledad. 

Llego cansado a las cúspides, 
tanto que reciclo exhalaciones 
para convertirlas en alientos 
de los aullidos en las caídas. 
31 de marzo 2025. Sincelejo, Sucre.  
En: Alaridos (2025). 


Renací 
 
Empieza por final rotundo cualquier libro y así mismo 
después de 28 años vuelvo con taras de la vida anterior y  
una predisposición por encontrarme en los demás ojos, 
ya no recuerdo bien cuánto duró este embarazo pero 
si algo sé, es que llegué ya preñado de mucho tiempo, 
por mí mismo en la frontera, volé hasta aquí en estado 
crítico, mi mamá y hermana me recibieron así, el sábado 
atravesé el túnel y llegué a la finca a punto de dar a luz 
desde la sombra, no resisto y el domingo, mientras 
agonizo, tranquilo, pausado, viene a despedirme un 
emisario de los confines amigos de mis pasados, para 
decirme que todo está bien por allá, mentiras de tiniebla 
para aflojar el alumbramiento y no irnos a morir los dos, 
grito con las últimas fuerzas del anochecer, pero no 
tengo miedo, ya no lloro, vine a morir, pero si no llegué 
muerto es porque otra vida va a llegar desde esta a 
otra, por eso al final del día llovió tanto refrescando 
y redimiendo lo pendiente, me entrego… hace calor, 
siento frío, me tomo un aguardiente, ya lo que será 
está siendo… entonces llega, logro parir luego muero. 

Veo amanecer como si me llevaran a conocer el hielo, 
en San Jerónimo, en el parque principal, sentado frente 
a la iglesia de este pueblo paisa, vine a parirme a mí 
ante el poblado dormido y desfigurado de este lunes 
de septiembre, me esperan en Medellín, Cúcuta y ya 
ha nacido otra versión ulterior rumbo al martes, del 
resto del lunes en la flota en la que más tarde me iré 
recién nacido, a resolver la brevedad de este cuerpo 
destinado a perecer como todo cuerpo y reencarnar; 
ojalá la fría palabra, el dolor, lo oscuro no detecten 
lo que de mí queda en este nuevo yo tempranero, 
esos serán asuntos posteriores, celebro estas vidas 
entre la montaña ya sin neblina, nazco con el sol y 
la iglesia campanea la primera misa de la semana; 
se escucha hasta Santa Fe de Antioquia y Sopetrán 
para que nadie se quede sin saber que nuevamente 
estoy aquí, atravesando la muerte otra vez, silencio, 
los pájaros ya lo saben, los gallinazos vigilan lo alto: 
me levanto de esta banca, estoy listo y asustado y 
neonato y todo apago el cigarrillo, inicia el poema. 
San Jerónimo, Antioquia. Lunes 26 de septiembre de 2022.  

En: Bondades de morir sucesivamente (2024). 


Diatriba por el calor de estas noches 

1000 maneras diferentes de decir hola y no adiós, 
la hoja de vida rota en sus 700 páginas ilegibles, 
el hambre fue una prolongada lección de humildad, 
dejar e irse, el arroz a fuego medio en la estufa,
de mis primeras décadas sin nada más que lo que soy, 
pensando en el doble filo de compartir la humareda, 
y de préstamos premonitorios con plazo vitalicio, 
¿no es el dinero una colección para personas baratas? 
y tantos platos de comida y camas de alimento, 
arremolinándose junto a las pasiones atadas al metal, 
besos en los confines de mis temores personales, 
los cuerpos sudan entre una virulencia erótica, 
lágrimas en las palabras, las copas y los libros, 
confundiendo cambié boinas por gorras de rapero, 
calles por escenarios, rituales cotidianos, parrandas, 
hasta el resto de la degradación toxica del tiempo, 
¿si se acumula estallará el futuro en algún pasado? 
devolviéndome a un desconocido, definitivo, reinicio. 

999 maneras diferentes de decir hola y no adiós, 
brumas entre los movimientos retorcidos del sexo, 
no han faltado los meses de la angustiosa soledad, 
robando Wi-Fi para lanzar mis cohetes por doquier, 
deseando la celebración de un suicidio secreto 
sin la agobiante desaparición de mi existencia 
como desvanecido íntimamente de los demás 
pero cazando en nuevas redes amistosas y distantes, 
recién despierto, sudando una involuntaria siesta 
mientras la culpa del delito de dilaciones diarias 
atraviesa las carnes dónde estuvieron mis dedos 
porque dicen que parezco no estar ni ser a veces 
pero ahí estoy fugitivo de la jornada y de mí mismo, 
aquí estoy sufriendo con todos los adiós no dichos 
y aún con 998 maneras diferentes de decir hola. 
Cúcuta, Norte de Santander. Abril, 2021. 
En: Antes del panóptico (2022). 


 VI. Dilaciones: 

No me gusta ser tanta justificación, pero y, y,  
y las madres a los hijos que nunca volvieron 
cuando se llevan meses a punta de galletas 
las hermanas y las hijas aún son violadas y 
y el no retorno del pavor de la ausencia y... 
y seguir y que más si ando entre perros y 
gatos y animales de las profundidades y. 
Bogotá y Cúcuta, septiembre y noviembre de 2021. 
En: Decálogo tempestuoso (2022). 


*Gibran Mouarbes Giraldo (Costa Rica, 1994). Psicólogo y fundador del Laboratorio de Teatro Universitario de la Universidad Nacional de Colombia. Paisa de crianza y ascendencia materna, libanes por su padre, vivió en diferentes departamentos de Colombia trabajando en el sector humanitario. Ha escrito los poemarios Como si hubiese futuro (2019), Decálogo tempestuoso (2022), Antes del panóptico (2022), Bondades de morir sucesivamente (2023), Partitura en depresión mayor (2024) y Alaridos (2025), el libro de cuentos Absurdismo, muerte y otras cosas que se llueven (2016) y en dramaturgia Almanaque (2017), Monólogo mientras el cerdo se quema (2017), Filoctetes (2018), Sonará taz, taz, taz (2018) y Cabañuelas (2025), se encuentra terminando su primera novela en la compañía sagrada de sus perros.

miércoles, 20 de agosto de 2025

"Lagrimas en el lienzo" poemas de Tatiana Vega


Lagrimas en el lienzo

--- Lagrimas
Llego a pensar que el mar voy a secar,
últimamente no dejo de llorar.
hasta caminar me suele lastimar.
 
En mi piel aún vive
la última caricia que me diste.
 En mis labios,
el rastro de tu sabor agrio,
ese que robo el dulzor
que yo tanto amaba.
 
Te cambiare el nombre,
te llamare pirata.
Vas de puerto en puerto,
robando sentimientos,
dejando ruinas a tu paso.
 
Te llamare pirata,
poque pretendes que seque el océano
con mis lágrimas,
mientras cautivas a otra sirena.
 


Desde pequeña me enseñaron
que la materia no se crea ni se destruye,
simplemente existe, transformándose sin cesar.
Y si somos materia, también somos energía;
Fuente inagotable de inspiración,
una diminuta pero inmensa parte del universo.
 
Somos instantes que ansían pertenecer,
ser parte de algo o de alguien,
somos un beso, un suspiro compartido,
una sonrisa inesperada,
la coincidencia que cambia un rumbo,
la madrugada en la cual hablamos hasta las dos de la mañana,
el abrazo cálido antes de una despedida
o esa llamada que esperamos todo el día.
 
Y como la materia no puede ser destruida.
Estamos destinados a encontrarnos
una y otra vez,
a lo largo de nuestras vidas.
 
Gritos en la poesía
Cuando me siento perdida,
Suelo salir a contemplar el cielo nocturno,
al mirar las estrella, al entender
que somos apenas una diminuta molécula
en la inmensidad del universo,
mi dolor se vuelve pequeño,
casi insignificante.
 
De niña, me aterraba el monstruo que
habitaba bajo mi cama, ahora sé que
cuenta buenos chistes
y, en el fondo, nunca me ha dejado sola.
 
Con el tiempo, aprendí a conservar
los momentos de emociones intensas:
cuando llore por aquello que ahora
ya no duele,
cuando reí hasta que me dolió el estómago.
Cunado desee desaparecer porque
me sentía inútil.
 
En cada uno de esos momentos
fui más emoción que persona,
más tormenta que calma.
 
Mis gritos encuentran eco en la poesía,
porque ahí hablo sin miedo,
sin quien me lee logra identificarse,
puede elegir:
caer conmigo al abismo
o pedir ayuda.
 

*La poesía de Tatiana Vega es un viaje emocional donde cada verso es un reflejo de la vulnerabilidad humana, en lágrimas, la metáfora del amor y el desamor como un océano se despliega con fuerza, comparando la perdida con un pirata que roba sentimientos y deja ruinas. La melancolía se mezcla con la imagen de un mar que se vacía entre lágrimas, evocando un dolor profundo y honesto.
Por otro lado, instantes inmortales, nos transporta a una reflexión casi filosófica sobre la naturaleza efímera de la existencia y la eternidad de los momentos compartidos, con un enfoque que une la ciencia y la emoción, el poema nos recuerda que al igual que la materia y la energía, los lazos entre las personas nunca se desaparecen solo se transforman.
Finalmente, gritos en la poesía, es un testimonio de lucha, a través de recuerdos, miedos infantiles y emociones intensas, el poema captura la complejidad de la experiencia humana.
Cada uno de estos poemas resaltan la capacidad de Tatiana Vega, para entrelazar la nostalgia, la introspección y la belleza en palabras, su estilo honesto y evocador logra que los sentimientos mas personales se conviertan en experiencias universales.

martes, 19 de agosto de 2025

"Existencia" poemas de Gustavo Pablo Reyes Escalona Vázquez


QUISIERA

Quisiera multiplicar  
panes y peces,  
alimentar a los sagrados ancianos  
con condecoraciones y discursos,  
sanar sus achaques  
con una fe que quiebra y muere.
A los niños, como un mago,  
tocarles en juguetes la consigna;  
ser más que el de la tradición:  
Papá Noé de los de abajo,  
con certezas que abracen el futuro.

Quisiera lanzar al azar,  

en fin de año,  

la última promesa incumplida  

y festejar el primero de enero  

con una revolución de esperanza.


Quisiera cambiar el verde y el rojo,  

no por más grises,  

sino por un arcoíris de sueños,  

mejor aún, por hechos;  

no solo palabras.


Quisiera morirme o que me maten;  

escapar de este mundo  

de verdades prefabricadas  

y medias mentiras no tan ciertas.


Quisiera decir lo que no pienso,  

o lo que pienso y digo en estos versos;  

pero presiento que si pudiera hacer  

lo que quisiera,  

sería un mártir más en este cuento.



EXISTENCIA


Desde el amnios al cenit declino

catarsis de mi llanto y de mi vino

bajo el árbol de natura vivo

sin plegar las alas de Polimnia

siento de la embriaguez y del dolor

como un suspiro

y se me escapa un planeta de cristal

de entre los dedos

del vivir no se a quién  debo

la puerta, las escaleras hacia el cielo

desde el amnios al cenit declino

como un humano más

y del arte de existir prefiero

sonrisas, los rincones tiernos

la fruta que madura el equinoccio.



UNA MUJER


Una mujer es más que un árbol, 

que una camisa, que un abrigo, 

que un látigo furtivo en madrugada. 

Una mujer es génesis y apocalipsis, 

diluvio, credo, ideología; 

no es partido, congregación; 

no es promesa ni utopía. 

Es luz, amanecer, 

torrenciales aguaceros; 

de la noche alguna estrella, 

como brújula 

o como el rocío: frescor 

sobre la almohada. 


Una mujer es tanto, 

aunque parezca nada: 

revolución, tormenta, 

dudas, porque no; 

pero también certezas: 

atardeceres rojos, 

playas, cascadas, 

precipicios, puerto. 


Una mujer es todo, 

aunque la quieran 

hacer parecer tan poco.



*Gustavo Pablo Reyes Escalona Vázquez, Puerto Padre, Las Tunas, 1965. Técnico medio en Energética. Poeta y narrador. Ha obtenido premios y menciones en concursos , en Cuba, España, Ecuador y Argentina, su obra, tanto poética como narrativa, ha aparecido fundamentalmente en antologías y suplementos literarios de varios países de América Latina, Canadá, España y Estados Unidos. Libros: Poesía de amor y otras verdades (poemas, 2023, Argentina).

lunes, 18 de agosto de 2025

"Conjuro nocturno" poemas de Lina Sofía Díaz


EL SUSURRO DE LA LUNA MUERTA

En la sombra de la luna muerta,  
se esconde el alma triste yerta.  
Voces susurran entre los muros,  
se ahogan en susurros oscuros.

La neblina cubre el mármol frío,  
y en el viento flota un desvarío.  
Bajo el roble, la muerte espera,  
un suspiro, y la vida se cierra.


SENDA DE FUEGO Y SOMBRA

Mi cariño es un frondoso jacarandá,
que en sus raíces guarda mímicas añoranzas,
y en sus frutos deslumbra hermosas ilusiones.
Mi corazón es un caleidoscopio de contrastes,
que se difuminan en la luz de tu mirada,
y se armonizan en la odisea de tus besos.
Mi amor es un clarín de épicos horizontes,
que proclama vívidos lazos incorpóreos,
y propaga en cada latido el fuego eterno de la pasión.
Tú eres el ángel de mi poesía,
la diosa de mis deleites,
el misterio que siempre he perseguido.
Juntos recorreremos la senda del amor,
sin importar las sombras ni las penumbras,
porque nuestro fuego alumbrará cada rincón. 


CONJURO NOCTURNO

Desde el incógnito anochecer
hasta el relente solar,
lucía venturoso,
un efímero lacar.

El centelleo del firmamento
y el refulgir del mar,
inspiraban una esperanza
colosal, alegre y singular.

La labrada portal
invitaba a entrar,
en el castillo campestre
del incomprendido zar.

Siluetas enaguas,
saltaron sin cesar,
en el sombrío bosquejo
en el que nadie se atrevía a entrar.

Con brío, el rey del viento
sopló con mucho jolgorio,
llenando de alegría,
el alma del bosque mágico.
Y así, entre el conjuro de las palabras desconocidas,
la noche se disfrazó con un manto de misterio,
fruto de la magia que habitaba entre las sombras,
siempre lista para tejer nuevos hechizos.


*Lina Sofía Díaz nació el 26 de marzo de 2007, y desde temprana edad ha mostrado una profunda fascinación por la escritura. Aunque aún no ha publicado ninguna de sus obras, su talento en el ámbito literario es innegable, especialmente en el campo de la poesía.
Su estilo literario se distingue por su capacidad de mezclar lo oscuro con lo introspectivo, explorando temas como lo gótico, la nostalgia, el universo y lo esotérico. A través de sus versos, Lina Sofía captura la esencia de lo místico y lo desconocido, creando una atmósfera que invita a la reflexión y a la exploración del alma humana.
La poesía de Lina Sofía se caracteriza por un lenguaje evocador, cargado de imágenes potentes y sensaciones que transportan al lector a un mundo donde lo inexplicable y lo maravilloso se entrelazan. La nostalgia y la fascinación por el cosmos son recurrentes en sus escritos, en los que la autora explora las sombras y luces que definen tanto el universo exterior como el interior.
Aunque su obra aún no ha visto la luz del público en forma de libros o publicaciones formales, su potencial creativo promete un futuro brillante en la literatura. Sus escritos, llenos de misterio y emoción, demuestran una sensibilidad única para abordar los grandes temas de la existencia, la identidad y el misterio de lo inexplorado.
Con su pasión por la poesía y su inclinación por los temas esotéricos, góticos y cósmicos, Lina Sofía Díaz es una autora emergente cuyo trabajo promete captar la atención de quienes buscan una poesía profunda, enigmática y conmovedora.

viernes, 15 de agosto de 2025

"Poeta solitario" poemas de Jefferson Dix Castillo


Poesía del día 

Buenas tardes amada mía, 
espero que te encuentres más bella día tras día. 

Sabes, una vez,  
se apareció un ángel en mi vida,  
con lindos ojos y una sonrisa que me llena de alegría. 

Ese ángel eres tu amada mía,  
por qué te pienso y admiro todo los días,  
eres como el amanecer por el día,  
el atardecer por las noches frías. 
 
Eres esa luz que alumbra mi día a día, 
sin más me despido princesa mía 
que tengas un lindo día, amada mía. 


Poeta solitario 

Un poco de poesía,  
para quitar la melancolía, 
pero usted reina mía,  
eres todo lo que pudo tener mi vida.  


verdad

La verdad, un camino sin fin,
que nos guía hacia la luz divina.
Un reflejo de lo que somos,
una mirada honesta a nuestros corazones.

La verdad, un río que fluye,
que nos lleva hacia la libertad y la vida.
Un canto que resuena en el alma,
una llamada que nos hace despertar.

La verdad, un espejo que refleja,
nuestros pensamientos, nuestras acciones, nuestra esencia.
Un recordatorio de lo que debemos ser,
una guía que nos ayuda a encontrar nuestro camino.

La verdad, un regalo divino,
que nos permite ver el mundo con claridad y amor.
Un tesoro que debemos proteger,
una llama que debemos mantener viva en nuestros corazones.

 
*Jefferson Dix Castillo, Cartagena de Indias, Colombia, 2006. Poeta perdido en el mar del olvido, que solo escribe poesía, a la luz de la luna.