“De todo corazón acepto el lema de que “el mejor gobierno es el que gobierna lo menos posible”, y me gustaría ver que esto se lograra pronto y sistemá¬ticamente. En la práctica significa esto, en lo que tam¬bién estoy de acuerdo: “El mejor gobierno es el que no gobierna en absoluto”; y cuando los hombres estén preparados para él, ese y no otro será el que se darán. El Gobierno es, a lo más, una conveniencia; aunque la mayoría de ellos suelen ser inútiles, y alguna vez, todos sin excepción, inconvenientes.”
En: Del deber de la desobediencia civil
Henry David Thoreau
Hoy en torno a lo que nos reúne, la escritura, la palabra, quisiera hacer uso de esta como mediador de lo que es mi postura en La Nave de los Necios, pues, aunque trabajamos como colectivo lo que quiero sentar aquí son las motivaciones que me impulsan a escribir en este sueño colectivo. Y es bueno hacer esta claridad, pues en un país que por hacer uso de esta facultad y decir lo que se piensa lo más seguro es que te manden a “los infiernos”.
Y ahora que viene a colación el tema del infierno que bueno comentar un poco sobre éste, lo digo aprovechando las pascuas ya que El Peñol un pueblo reconocido por su fervor religioso, éste pudo ser testigo de un digno acto de fe por parte de uno de los representantes de la iglesia Católica que cumplen misión en nuestro querido municipio. El domingo de resurrección en las horas de la noche, en medio de la exaltación por el regreso del esenio de su tumba, entusiasmo del cual no tengo reproche alguno, pues también tengo afición por los muertos vivientes; al parecer a un señor de esos de batola le cayó un poco pesada la copa de vino bebida en la consagración, pero es que después de tantos años en los que no comparten ni una copita, ¿a quién no se le sube el alcohol? Es una gran paradoja, Jesús en la última cena repartió pan y vino, y en la iglesia el pan no es pan porque tiene más sabor el chicle Adams y el único vino que he tomado allí es el que he llevado conmigo, el cual he compartido solidariamente como me lo enseño el hippie del desierto. ¡Qué manera de conmemorar a su ídolo! Por eso, Si quiero encontrarme con el señor Jehová prefiero hacerlo en la luna de X – 504, al menos hay incienso para oler.
Es absurdo, No sólo tienen el descaro de hacer ruido con sus parlantes a un volumen descomunal pregonando la mojigatería y a darse golpes de pecho por un señor que murió por nosotros, del cual ni siquiera son capaces de hacerle la conmemoración que se merece, sino que por ese mismo egoísmo terminan bendiciendo carros con sus propios carros, que ejemplo de vida, de moral, de crecimiento espiritual. ¡Entiendan, Jesús murió por nuestras vacaciones, no abusen más de su bondad!
Ya este año se cumplen trescientos años de fundación de El Peñol, y ¿qué nos han dejado? Un pueblo pobre, ignorante, violento, sumiso, explotado, exiliado. Y digo exiliado porque ya van treinta y seis años de la fundación de la nueva cabecera y aunque los cambios han sido drásticos en tanto las prácticas culturales de sus habitantes gracias a las transformaciones territoriales que asumieron los municipios afectados por la construcción del embalse, en la política parece que se sumiera aún en el poder hegemónico infundado por la iglesia católica. Es de recordar toda la influencia que tuvo este estamento para negociar la construcción de esta nueva cabecera, tanto que se dice que es “un pueblo construido por la fe”, este estamento que sigue teniendo gran poder de decisión sobre la comunidad.
Aunque el fervor, en especial por parte de los jóvenes, que es la mayor parte de la población peñolense (36 %) no es tan fuerte como fuese otrora, sigue teniendo gran presencia en el municipio como proyecto cultural, como en el caso de unos grupos de oración que parece estuvieran al servicio del Opus Dei, pues es cuestión ver la multitud de jóvenes que pueden inundar las calles y sitios de encuentros en zonas rurales ondeando sus banderas tal cual en un desfile de una legión fascista adoctrinados por la repetición de la repetidera de sus rosarios.
Para alguien con una capacidad normal de realizar la sinapsis entre los neurotrasmisores del sistema nervioso central no es un secreto que la iglesia siempre ha tenido gran influencia en las elecciones locales. Ahora, me pregunto ¿qué programas u opciones culturales tenemos en El Peñol que no sean los mismos trillados programas oficiales y que no pasan de convocar a los mismos cuatro peludos preocupados por el devenir de este municipio? ¿Cuánto es la inversión pública del presupuesto municipal en programas educativos/culturales y que eficacia tienen?
Con todo el respeto que merece cada persona en su libre albedrío de construir su proyecto de vida, pero yo por mi parte estoy mamado de que quieran construir una identidad cultural basada en rosarios y efemérides, dentro de esa misma libertad, yo no sé ya de que morir en este pueblo, si de hambre o aburrimiento.
Resulta tormentoso que siendo un municipio de los que aparece con más índices de desarrollo del departamento, tenga según la revisión del EOT municipal de 2012 un Treinta y uno por ciento (31%) de la población viviendo en la miseria y un quince por ciento (15%) en la pobreza, es decir casi la mitad de la población tiene necesidades básicas insatisfechas. ¿Será que ha faltado un proyecto con la inteligencia y eficacia política para gobernar en estos territorios? O ¿estamos puestos al servicio o en las manos de quién o qué fuerza?
La descomposición social que sufre hoy El Peñol es fatídica, no más echemos la mirada tres meses hacia atrás, pero en el país del sagrado corazón una masacre se olvida pronto con la próxima desgracia, la televisión, el móvil, el internet son muy buena terapia en favor de la amnesia colectiva. Pero no hay que perder las esperanzas y eso por mi parte es lo que motiva a hacer parte de este proyecto, pues recordando algo que suele citar un amigo:
“Todo lo que obre en favor de la evolución de la cultura, obra contra de la guerra”. Sigmund Freud, en carta a Einstein desde la Viena de 1932, cuando ya se escuchaban sonidos de guerra.
Y es que en El Peñol parece que los proyectos editoriales de esta administración estuvieran encaminados a la publicidad de operadores turísticos y cadenas de restaurantes, lo comento sólo por no pasarlo por alto, pues han habido otras en las que ha olido a azufre todo el tiempo ¿será que llevamos el diablo adentro?
El entusiasmo está puesto en que este sea un buen comienzo para tomar un respiro en esta tierra querida, y hoy justo aquí veo la oportunidad para invitarlos a soñar, pues estas son algunas de las problemáticas que aquejan a este municipio, pero estoy seguro, tristemente, que son situaciones generalizadas en muchas regiones de Antioquia y el país. La idea es, a que tomemos fuerza para obrar en favor de la cultura y si bien del oficialismo no encontramos el apoyo que proyectos como este merecen, seguir insistiendo formando redes de solidaridad como nos lo han enseñado culturas milenarias que aún perviven en un medio tan contaminado, proponer desde la autogestión.
Y si ni hay presupuesto, por supuesto nos tomarnos las calles como punto de encuentro ciudadano, la calle como espacio público por excelencia, que reviente las expresiones populares para la construcción de nuestra identidad.
Aquí dejo pues abierta la invitación a ustedes escritores a La Nave De Los Necios, a que nos lean en este segundo número que estamos presentando hoy, y si suscita la duda, la invitación también queda abierta a que escriban y a que lancen sus diatribas, este es un medio del pueblo y para él.
Después de estas breves reflexiones espero no me manden a “los infiernos” y si lo hacen pues me iré allí a reparar pailas trogloditas, con Gonzalo Arango y otros gitanos y lavarle la caja de dientes al diablo.
Muchas gracias.