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lunes, 13 de septiembre de 2021

"El misterio de una estrella" poemas de Daniel Pommers


Luna llena en octubre: ritual de iniciación

Mi cuerpo busca el mar
Como el mar se ha abierto durante todos los tiempos
Y busca dentro de cada semilla,
En la misma bota de arena
El reflejo y el estupor
De una vida que entra
En la oleada y en el pensar
Libre de la alborada

Mi cuerpo busca el mar
Como busca mi cuerpo tus besos
Y busca cada madrugada acercarse
un poco más al
Cuerpo doliente pero vivo de la noche
Cuando ese cuerpo revienta entre las paredes
Y las sombras
Que se vierten en la pintura del local
En las hojas abiertas

En los estómagos que viven

Mi cuerpo busca el mar
Como también se abre una marejada en el infinito

Como también yo busco estas sonámbulas horas
Cuando el vino y el cigarrillo
Cuando Dios y cuando la virgen
Cuando entonces los hijos pardos de la madrugada
Se alejan
Y dejan quietas
Todas las pesadillas

Mi cuerpo busca el mar y en esta noche soy libre

Libre
Libre
libre
libre
libre.


Configuración de las mañanas

El cielo abre sus ojos abismales.

Me siento en una alfombra y miro el azul,
los blancos y neutros colores de la luna,
las estrellas con su añejo vivo y dulce eco,
la eternidad de un saludo,
la mirada en secreto de las hojas
cuando el sonido misterioso de la humanidad
se promete libertades y maullidos en código;
y el autor de los sueños regresa cada vez que somos
una campanada de bocas en la piel, destruyendo los miedos,
solo los amantes de la noche me entienden.
A veces soy un ser que irradia luz,
luz,
esta luz de los tiempos,
esta luz que se compromete a vivir en El Señorial.
Las horas son farolas, las horas y en las horas de nuestras muertes,
enteras son las horas y los segundos son un capricornio en este mundo.
Somos obsequios del lumbral portentoso de los amaneceres.

Se abren las nubes y solo miro vida y truenos verdes en la tempestad.

Fue así el comerse la putrefacción de tus lenguas,
el meterme en el odio irremediable de regiones desérticas
como antes en África
y en la novedad de los mares nuevos
y en el pórtico, y en el Caribe;
donde toda la numen de los astros se hizo ave purísima y concebida sin pecado;
donde los lobos llegan a comer de nosotros, cuando soñamos;
en cuanto a la totalidad del tiempo hay un temblor
que mira,
que me absorbe.
Tanta sangre se perdió en la batalla de Dios
contra los ángeles libertos, aun cuando las estrellas
de las mañanas y los fríos de pensarte en otro mundo
son luces insólitas; son luceros y madres de la contrariedad.

Nosotros en gloria del espíritu // instrumentos del planeta uno
nosotros volamos libres con los minutos.
            El diluvio
        se rompe en mil canciones.
        Así el sonido de los torbellinos
                en mis sueños
            es hoja mojada
                es hija de mi amabilidad.


El misterio de una estrella 


Una luz visita mis sueños y me inicia en sus colores,
en la historia de los universos y su conexión interestelar;
abre los libros que guardo frescos en la pared,
me busca en el infinito de las hojas verdes y en el calor y el verano. 
Cuando me descubre libre, soy libre nuevamente en la maleza 

en la profundidad del océano 
en el municipio de la amistad, en el hálito de mi sangre 

y regresa en mil dimensiones a Magonia, tal vez regresa a un meteoro  
que me conoce desnudo y haciéndote el amor en el prisma de las Bermudas,
en el Paraíso, en este segundo que quizás me conoce y que es caverna y amanecer;
así la luz es eterna fugitiva, 
como los primeros seres que habitaron la creación.
La iniciación ya no pide sangre, pero grita toda su brillantez.
Conversa con la luna, y la luna que sabe a uva es nuestra luna. 
La luna se mira siempre como una garganta, como una voz eterna.


*Daniel Pommers (Daniel Márquez Rivera) (Ceiba, Puerto Rico, 1985). Estudió bachillerato en Sociología en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y en el Programa de Maestría en Creación Literaria de la Universidad del Sagrado Corazón en Santurce. Es autor del libro El esqueleto presenta (Editorial Bacanal, 2009), Que así sea: Poemas 2005-2011 (Gato Malo Editores, 2013) y El libro de la suerte (Gato Malo Editores, 2020); asimismo, ha colaborado en revistas y periódicos nacionales como la Revista Bacanal (varios volúmenes), La Polis, Hotel Abismo (volumen #6), Periódico El Rehén, TeknoKultura, Letras Salvajes, Revista Digital Voces Subversivas. Actualmente forma parte de Generación del Atardecer Presenta y es presidente de la editorial independiente Gato Malo Editores.

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